Los microbios nos defienden
Cada vez se sabe más sobre cuál es el papel de los microbios que llevamos en nuestro cuerpo. Antes se creía que habitaban en nuestros intestinos, en nuestra boca, nariz o pulmones, y que no jugaban ningún rol en especial, salvo cuando nos enfermamos y nos dicen que tenemos una infección, la cual inmediatamente la relacionamos con estos microbios. Ahora también se sabe que los microbios nos defienden.
Numerosos estudios demuestran que la flora microbiana, llamada ahora “microbiota”, tiene gran importancia específica, dependiendo el órgano en que habita. El medio o hábitat más importante es el intestino, seguido por las vías aéreas.
Qué es la microbiota?
Esa microbiota tiene un funcionamiento y vida propias. Las distintas colonias conviven en equilibrio, y cada una tiene una función. Una de las funciones de la microbiota del intestino grueso, o colon, es la de fabricar inmunoglobulinas, es decir, anticuerpos. Estros anticuerpos son una de las barreras de defensa mas importantes que tenemos. Pero además, ahora se sabe que esta microbiota es un órgano en sí, con su propio funcionamiento y que está en contacto con el sistema nervioso central. Es decir, se conecta con el cerebro mandando información y éste a su vez devuelve órdenes precisas mediante los linfocitos. Es decir que a los microbios de los intestinos los tenemos que cuidar.
Lo mismo ocurre con la microbiota de nuestro aparato respiratorio. En la nariz, garganta y bronquios conviven gérmenes que cuando se alteran nos enfermamos. Hoy se sabe que algunos virus provocan infecciones respiratorias sólo si son ayudados por otros germenes que habitan en esos sitios. Y que el equilibrio de esa microbiota es fundamental para mantenernos sanos.
En el caso de los niños y los bebés es muy importante mantener la microbiota sana
1.- Alimentar desde edad temprana con alimentos variados y diversos. Ya desde antes del primer año el bebé tiene que estar comiendo de todo, y sobre todo frutas y verduras. Las fibras y composición de éstas mantiene un buen funcionamiento de la flora de los intestinos.
2.- Los bebés nacidos por cesárea no llevan la flora microbiana que tienen aquellos que nacieron por vía vaginal. Por lo tanto ya desde los primeros días conviene administrar probióticos
3.- Los antibióticos alteran la flora microbiana. Recordemos que éstos matan los gérmenes que causan la infección pero aveces, también matan los microbios buenos. Por lo tanto, nunca automedicarse con antibióticos, y en el caso de los niños sobre todo, administrar probióticos junto con los antibióticos y hasta unas semanas luego de terminar el tratamiento.
Qué son los probióticos
Los alimentos probióticos son alimentos con microorganismos vivos adicionados que permanecen activos en el intestino y ejercen importantes efectos fisiológicos.
Hay probióticos formados por una cepa microbiana viva como el lactobacilus GG y otros que van acompañados por azúcares compuestos (fructooligosacáridos) que favorecen el crecimiento y el equilibrio de la flora intestinal.