Cólicos. O puede ser otra cosa?
Alrededor de un 40 % de los bebés tienen cólicos. Un llanto agudo, que dura mas de 3 horas por día durante por lo menos 3 días por semana. Empieza entre las 3 y 6 semanas de vida, hasta despues de los 4 meses. Y la mayoría de esos bebés cumplen con un perfil en concreto.
En general presentan patrones horarios. Algunos empiezan a las 10 de la noche y pueden llorar hasta las 3 de la mañana, por lo que los padres ya saben lo que los espera.
Es casi imposible calmarlos durante el llanto pero durante los períodos de calma son niños normales que comen y duermen sin dificultad.
Pero, a veces el llanto es mucho, mas prolongado, empieza durante la toma de leche (pecho o fórmula), el niño se retuerce, y a veces termina con un vómito importante. En algunos casos las deposiciones también son anormales con mucho moco y hasta puede haber algo de sangre.
En ese caso hay que pensar que puede tratarse de una intolerancia (alergia) a la proteína de la leche de vaca. Los bebés alimentados a pecho también pueden tener estos síntomas si su madre toma productos lácteos.
Unos días después de suspender todo aporte de leche de fórmula (recordar que las leches de fórmula están hechas con leche de vaca) los llantos desaparecen, así como los vómitos y las deposiciones vuelven a ser normales. La mayoría de estos niños son intolerantes a las proteínas de la leche de vaca durante los primeros años de vida pero casi todos superan este problema alrededor de los 3 o 4 años.
Por eso, aunque crean que se trata “solo de cólicos”, mejor consultar con el pediatra, porque puede tratarse de otros problemas.
Más allá de un cólico: Otros signos preocupantes
Además del llanto hay otros signos que hay que tener en cuenta para descartar otros problemas, a veces mas serios.
- Fiebre
- Erupción
- Tos con ahogos
- Rechazo del alimento
Además de la intolerancia a la leche otros problemas que pueden pasar por cólicos son:
Reflujo gastroesofágico: El ácido gástrico sube por el esófago provocando dolor . Vomitan mucho y lloran mucho durante la toma. Si el bebé rechaza el pecho o el biberón y se echa hacia atrás consulta con el pediatra.
Infecciones.:
Si el bebé está raro, si no reacciona normalmente, rechaza las tomas, o tiene fiebre, puede deberse a una infección; que tratándose de un niño muy pequeño, sobre todo en los primeros dos meses de vida, puede tratarse de una infección en la sangre, o en el tracto urinario. Por lo tanto, también debe consultarse con el médico inmediatamente
Problemas cardíacos o respiratorios: Un bebé quejoso, que rechaza el alimento, que tiene dificultad para respirar, a veces puede tener los labios azules, puede tener un problema en el corazón. Uno de cada 100 recién nacidos puede presentar un problema congénito cardíaco.
Cómo llegar a un diagnóstico correcto:Consultar con el médico:O por lo menos hacer una llamada al pediatra. El sabrá si es necesario ver al niño enseguida, haciendo unas simples preguntas.
Haz caso a tu propio instinto: Los padres tienen un sexto sentido, y saben cuando el bebé está raro y puede tratarse algo más que un cólico. En ese caso llévalo al médico o pide otra opinión.
No se trata de pensar siempre que “es un simple cólico”. Los cólicos son causa de mucho stress para los padres, por lo tanto aunque sen verdaderos cólicos, habla con el pediatra que tratará de ayudarte a sobrellevar el tema durante esas semanas.